Por fin

Os cuento mi vida, cumplí años y mi hermana me regaló dinero, como llevaba tiempo detrás de una fibreflex y tenia una buena oferta de una de segunda mano, pensé que era el momento.
TENGO UNA FIBREFLEX, por fin, he de confesar que si hubiera sido mi primera tabla hubiera sufrido, sin tail, cuesta girarla, con flex; pero como es la segunda, parece que no, pero algo sé, más estable, más flex, derrape más controlado, una genialidad.
Lo de la foto es un mountain-fingerboard o algo así, un jeguete de la infancia de mi novia y un regalo.
Chinpon.